POR POCO.
El nuevo Sanpa 2019-2020 de Carri y Paco echó a rodar oficialmente y cerca se quedó de dar un buen susto a la AE Sant Lluis, uno de los potenciales aspirantes al ascenso, al caer únicamente por la mínima en el estreno en competición de ambos equipos, en el partido disputado el pasado domingo en el Municipal Barri Centre de Sant Joan Despí. Con bastantes caras nuevas, el prometedor amater verdiamarillo dio buenas razones para al optimismo, al demostrar su capacidad para competir y dar la cara ante un rival mucho más consolidado y experimentado como bloque, como lo demuestran las clasificaciones del equipo de Santa Coloma de Cervelló de los últimos años. Se tonificó y no desfalleció ante el tanto inicial del conjunto naranja, que a los 8 minutos se adelantó en el marcador (0-1); y no solo supo mantener el tipo e impedir que se ampliara el resultado, si no que sería capaz de empatar el partido a principios del segundo tiempo, con un tanto del joven debutante Wilson (1-1. Min.48). Sin duda, una gran noticia.
Aunque es pronto para poder valorar el verdadero potencial de este equipo amater de la UD San Pancracio, es una señal muy positiva que se atreviera a discutirle la victoria a un todo un Sant Lluis que, pese al característico juego combinativo del que hizo gala la temporada pasada, pasó momentos de incomodidad y se encontró tirando del recurso de jugar en largo. Solo un despiste de la zaga verdiamarillo permitiría el 1-2 (min.53), cosa que obligó al equipo a adelantar más las líneas y aumentar los riesgos, pero aún así dificultó bastante la faena hasta el punto que sería el arquero visitante el que acabaría resultando clave, al desbaratar dos buenas ocasiones de Rafa y Rodri que bien pudieron cambiar el rumbo del partido.
En la recta final, el Sant Lluís pareció sentenciar el encuentro con un tercer gol (1-3. Min.79), pero la reacción del Sanpa sería inmediata. El gol de Rafa López (2-3. Min.85) devolvería la incertidumbre al marcador hasta el pitido final, provocando unos últimos instantes de acelarada emoción en los que alguna jugada pudo suponer tanto el empate como la resolución definitiva, manteniendo el interés hasta el definitivo envío a vestuarios. El golpe final no llegaría y, con este resultado tan ajustado, concluiría esta primera jornada de Liga, con la frustración sanpera de no haber logrado su objetivo de un buen resultado de inicio en casa, pero al menos con la satisfacción de haber realizado un buen trabajo y haber demostrado que su capacidad para plantar cara a sus oponenes, incluso a equipos más rodados, está intacta.
Próxima semana, visita verdiamarilla a Sant Feliu de Llobregat, en donde le espera un duro compromiso contra el Santfeliuenc «B».
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