ESTO NO ES JAMAICA.
Volvió el Sanpa tras dos semanas de descanso (una por Carnavales y otra por retirada del Deportivo Llobregat) y lo hizo con algunas sensaciones contradictorias. Se impuso con autoridad, el resultado más abultado del año, ante un rival hundido en la clasificación con una única victoria en lo que llevamos de temporada. Sin embargo, mostró más efectividad que juego, amén de una falta de regularidad y constancia durante bastantes fases del partido. Aunque en parte se podría justificar en las muchas y destacadas ausencias, cosa que obligó a presentarse con solo 12 jugadores de los 20 en plantilla y un once titular bastante alejado de lo habitual; o también se podría alegar que atípica hora del encuentro (las 4 de la tarde con un clima casi primaveral) daba pie a cierta relajación. De una manera u otra, se estuvo lejos del 100%. No tanto porque el equipo dosificara sus esfuerzos para aguantar el tute de los 90 minutos, algo hasta cierto punto lógico en una convocatoria tan corta. Sino por la falta de concentración o tensión competitiva que se pudo observar por parte de algunos presentes en ciertos momentos del partido.
A pesar del ajustado resultado de la ida (2-1), donde el portero pratense fue el mejor del partido, la diferencia entre ambos conjuntos es bastante significativa. Que Muralla, al que se le notó mucho la inactividad, tuviera que enviar a córner un disparo lejano, tras un libre directo, en el minuto 1; O una mala cesión que permitió a un delantero local encarar al arquero “palanquero” y regatearle, antes de env
iar al balón al lateral de la red con la portería vacía, fueron ejemplos de que el equipo tardó en arrancar en la puesta en escena. Por suerte, David abriría el marcador a los 11 minutos de juego, tras un dos contra el portero que Yeison cedió generosamente a su izquierda para el veterano “pancetilla” (0-1). Ese tanto aportó tranquilidad, de la misma manera que desmoralizó al equipo local.
Por lo demás, pese a las intermitencias, el primer tiempo fue un monólogo sanpero en el que podía haberse echado tierra de por medio de haber estado un poco más efectivos. Un magnífico pase filtrado por la línea defensiva de Raúl, socio-acompañante de “Captain Carrillo” en la medular, fue interceptado por el portero un instante antes de que Yeison se hiciera con el esférico (min.21). Y otro disparo de Raúl, a la media hora de juego, desde el arista izquierda del área grande, tras una dejada hacia atrás de “Portentoso” Moyano, lo desvió Carlos de su trayectoria a portería, al intentar rebañarlo cerca del borde del área pequeña (sí, Ratilla, eso cuenta como pifía y es un -2 en destreza). Otra ocasión de Yeison, que envió a manos del portero uno de los centros precisos de Andy en su “movimiento de Torre” por la banda, de H1 a H8 (min.34) y una oportunidad de Iván, que se marchó de todos por el centro de la defensa para irse directo a portería y… después enviarla fuera al dudar si hacer un pase a Yeison (en ese caso, demasiado fuerte) o disparar a portería (en este caso, demasiado desviado), pudieron ampliar el marcador que, sin embargo, se mantendría en una mínima ventaja sanpera antes de la llegada del descanso.
La efectividad llegaría en el segundo tiempo, gracias al segundo doblete de Rafi en lo que llevamos de temporada. Un claro penalti a los 54 minutos sobre Yeison, que se llevó un patadón tras realizar una pared con Carlos al borde del área (+2 en inteligencia, por ejecutar a la perfección lo que habíamos practicado la semana pasada en el entreno) lo materializaría “Matusalén” Díaz Turrillo a la perfección, imparable a la base del palo izquierdo del portero (0-2). Al mismo lugar y desde casi el mismo lugar, pero de cabeza a un saque de esquina helvéticamente y preciso lanzado por David, se repetiría la acción a los 70 minutos, ampliando la diferencia a tres goles y dejar listo para sentencia el encuentro (0-3).
A esas alturas, ambos equipos ya jugaban con 10 jugadores. Primero fue Sergi el que adelantó su “vuelo” a la ducha al ver dos tarjetas amarillas (la primera, erróneamente) en apenas dos minutos. Esto obligó a reconvertir a Paco en central y nuevo Mariscal de Campo, junto a los apoyos en la medular de “Carri-caminos” y Raúl. El castigo de la expulsión, tal vez algo desproporcionado para un partido sin apenas patadas, quedaría compensado cuando otro jugador del Delta Prat vio su segunda amonestación diez minutos después. No obstante, con el encuentro ya resuelto, se dio paso a unos últimos 15 minutos algo locos. Muralla hizo un “Casillas” al tragarse un disparo de falta algo lejano al que se tiró antes de tiempo (1-3, min.77). Y Menacho estuvo a punto de hacer penalti en su primera acción al salir al campo. Pero, por lo demás, más allá del cansancio o de algún que otro balón no atajado que se fue a las nubes, el Sanpa no sufrió demasiado. La ventaja volvería a ampliarse cuando al portero se le escapó de las manos un disparo raso de Raúl desde el flanco derecho del área, y apareció “Pichichi” Bernier para “cazar” ese balón y enviarlo sin compasión al fondo de la red por la escuadra (1-4, min.84).
La estocada final llegaría en las postrimerías del encuentro, cuando una genialidad de Carri, girándose y abriendo a la banda izquierda a lo Laudrup entre varios defensores, dejó a Yeison, pegadito a la línea de banda, una autopista para llegar hasta el área rival, recortar hacia al interior y batir al portero rival de fuerte disparo (1-5). Un magnífico gol que sirvió para reafirmar una contundente y obligada victoria que no debe dar pie a engaños, puesto que habrá que mejorar las prestaciones si se pretende mantener el excelente sexto puesto que se ocupa actualmente en la clasificación, donde prácticamente se han igualado los puntos obtenidos al final de la pasada temporada cuando aún quedan 11 partidos por disputar.
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