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Por segundo año consecutivo, la UD San Pancracio ha participado en el torneo de fútbol que organiza, en Barcelona, la Associación «Duchenne Somriures Valents», con la finalidad de recaudar fondos para invertir en la investigación de las enfermedades infantiles de distrofia muscular.  Al igual que en 2017, en el aspecto deportivo, el equipo que ha representado a la entitad ha sido el «Sanpa Legends«, con un grupo de ex-jugadores y ex-directivos del club,muchos de los cuáles formarán parte del futuro equipo de Veteranos. En esta ocasión, no se ha podido repetir la actuación del pasado año, dónde se alcanzó contra pronóstico la Final del torneo, pero el papel de la «delegación», dirigida por Javi Marcos, no puede más que considerarse como muy satisfactoria, dado que, con una media de edad que se acerca a los 40, se logró superar la fase de grupos para disputar las semifinales, tras varias horas bajo el sol abrasador de una cálida mañana de domingo veraniego.

El inicio, sin embargo, no pudo ser más desalentador. En constraste con la pasada edición, donde se debutó con una trabajadísima victoria sobre la PB Bon Pastor (rival de semifinales en esta edición), el estreno en ésta no pudo ser más calamitoso.  La PB Can Baró, a la postre primero de grupo,  logró sorprender en el primer duelo del GRUPO A a un Sanpa que pagó caro su frío arranque. El contundente 4-0 final favorable a los jugadores del sur de Horta-Guinardó, si bien pudo parecer demasiado abultado y sin reflejar una mayor igualdad real existente entre ambos equipos, fue un clarísimo toque de atención y un aviso para «navegantes» de que el torneo no iba a ser un paseo. Aquel que quisiera progresar, tendría que esforzarse y demostrar sus virtudes colectivas. En este caso, la falta de intensidad defensiva y la ausencia de acierto a portería, acabaron con un revolcón para el Sanpa, que bajó rápidamente de la única nube que debía haber en el cielo en ese momento.

Sin mucho margen para la reacción, el segundo duelo tampoco iba a estar falto de exigencia. El Speed 58, equipo con representación de la organización y rival en semifinales en el pasado año, prometía ser un durísimo rival. Y, como después se vería, este duelo iba a ser determinante para decidir quién sería el segundo participante de este GRUPO A en semifinales. Fue un partido emocionante, intenso, con su puntito de tensión al ser muy competido. Al descanso se llegaría con el 0-0 inicial. Una igualdad que rompería uno de los debutantes con la camiseta del Sanpa, Dani Estrany, cuando, tras una recuperación de balón en el medio del campo, sorprendió con un disparo de primeras, sin mirar a portería que, formando una parábola, entraría por toda la escuadra del marco rival (1-0). Un golazo clave, el primero del Sanpa en el torneo, que daría mayor tranquilidad al equipo y permitió tomar un mayor control del encuentro ante la precipitada necesidad de remontada del equipo local. Un disparo de Lucho desde fuera del área, favorecido por afortunado rebote del portero, acabaría cerrando una trabajada victoria (2-0), que suponía un paso importante de cara a disputar la Segunda Fase.

Sin duda, la gran novedad del torneo para el Sanpa fue el tercer partido, en lo que supuso su primer duelo de su historia contra un equipo compuesto integramente por féminas: el CE Sant Jordi. A pesar del resultado,  el joven y prometedor conjunto femenino se ganó su merecido respeto y obligó al conjunto de Sant Joan Despí a ponerse las pilas, ya que de buen inicio demostró que no iba a dejarse impresionar ni por el físico ni por la mayor veteranía de sus rivales. De hecho, al descanso, la diferencia era mínima: 1-0, gol de David «Spider» Moyano, que ejerció de jugador de campo para la ocasión. Con el paso de los minutos, la resistencia del Sant Jordi acabaría cediendo ante el mayor abanico de recursos sanperos, que iría sentenciando el encuentro con goles de Lucho, Óscar, Ortega y Reverendo, y sumar así la segunda victoria de fase de grupos en un partido inevitablemente un poco especial por la novedad de una más que interesante experiencia.

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A pesar de la expectación, el duelo contra la Federació de Penyes del Barcelonès Est, que contaba con algunos ex-miembros del FC Barcelona (como el ex-directivo Toni Freixa) no llegaría a disputarse, muy a pesar de un especialmente motivado Marcos. El calor pasaba factura a esas alturas ya de mediodía, y el Sanpa se llevaría los tres puntos por retirada de su rival, ya sin opciones de clasificación, con lo que solo debía esperar a que no se produjese ningún triple empate en el último partido de su grupo, para afrontar el «cara o cruz» que iba a suponer jugar una semifinal.  Algo que acabaría ocurriendo, puesto que la PB Can Baró mantendría su imbatibilidad hasta el último partido y, por lo tanto, encabezaría la clasificación con el pleno de puntos, justo por encima del Sanpa Legends.

MVP: El Guerrero Goleador, concentrado.

Para hacerse por un puesto en la final, Sanpa y PB Bon Pastor iban a reeditar su duelo del pasado año, cuando los sanperos se impusieron por la mínima para avanzar cómo líderes de grupo de la Primera Fase. Esta vez no había «factor sorpresa» y el «factor edad» (también conocido como el «Síndrome del Madurito») podía llegar a ser más determinante, consecuencia del desgaste físico producido después de tantas horas de competición. Como era de esperar, el duelo se inició con unos largos minutos de tanteo y respeto mutuo, dónde ninguno de los dos equipos lograba imponer su estilo de juego y el gol podía caer para cualquiera de los dos bandos. Siempre quedará en el recuerdo qué hubiera sido si el sorpresivo remate de rabona de Carri no hubiera encontrado al portero bien colocado. Sin embargo, poco antes del descanso, el equipo de Bon Pastor se adelantaría en el marcador y daba un golpe psicológico sobre la mesa (0-1). En sus mejores momentos del partido, con el Sanpa algo desarbolado, el segundo gol «granate» tras un disparo mal tapado desde fuera del área, ajustado al palo, parecía decantar el partido, puesto que la fortuna y la puntería no estaban generosas con un Sanpa que se toparía en dos ocasiones con los postes cuando el porteró ya estaba batido. Y, de lo que pudo haber sido el 1-2, se pasaría a un 0-3 tras una nueva contra aprovechada por un equipo de Sant Andreu,  que sumado al «grogui» del conjunto de Sant Joan Despí, podía parecer que dejaba todo prácticamente sentenciado antes del descanso.

Pero quién conoce a la UD San Pancracio, en las historias populares locales que circulan por el Baix Llobregat, sabe que hay equipos a los que nunca hay que dar por «muertos». Tras el disparo de falta al palo de Dani y el remate de coronilla de Chus que salió desviado, el gol de Lucho para recortar distancias (1-3) provocó que el rival tomara todas las medidas conservadoras habidas y por haber, reduciendo incluso las salidas al contraataque. Para sorpresa de todos, los «maduritos» sacaron todo lo que les quedaba de energía y coraje en su interior y fueron en búsqueda de esa remontada que parecía tan remota minutos antes. El 2-3 de Lucho, con un remate de cabeza cruzado a un saque de córner, hizo creer en lo imposible con el tiempo agotándose inexorablemente. Sin embargo, al final, la PB Bon Pastor supo sufrir hasta el final y logró defender su ventaja hasta el pitido del árbitro, con lo que obtendría por méritos propios su lugar en la Final del Torneo (en la que no podrían contra los Reds, campeones de esta edición).

Todo ello a costa de un Sanpa Legends que, pese a no poder repetir su segundo puesto del año anterior, puede decirse que ha realizado un papel una vez más memorable, donde ha demostrado un espíritu competitivo a pesar del clima, la media de edad y una condición física mejorable tras haber concluido la temporada un mes antes.  Una vez más; ¡enhorabuena, muchachos!

Gracias a todos los que habéis participado, a los fotógrafos y, especialmente, a Sergio Rubio por su aportación periodística.

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